Una "scoiattolo" me conto una vez la interesante historia sobre este plato y ahora os lo cuento.
Se dice que la palabra «pizza» proviene de pinsa, del latín,
que significa ‘machacar’, ‘presionar’, ‘aplastar’. Esta descripción hace
referencia a la manera de elaborar la masa de la pizza, así como a su origen en
una forma de pan plano.
Se tiene constancia de que en la antigua
Grecia los soldados persas tomaban pan plano con queso fundido
y dátiles
en su parte superior.
Debido
a que el tomate no llego ha Europa hasta el siglo XVI, hace que lo que
actualmente se entiende por pizza no fuera posible antes del XVIII que en las
áreas pobres de las afueras de Nápoles
se añadió tomate a un pan plano y de esta manera nació la pizza. Aunque se sabe
que antes de la llegada del tomate a Italia, los napolitanos preparaban lo que
hoy en día se denomina «pizza blanca» elaborada con ajo, perejil
y aceite de
oliva.
La inmigración italiana ayudó a que la pizza se expandiera, haciéndola
muy popular. Uno de los primeros panaderos italoamericanos en reclamar la
elaboración de la primera pizza en América es Gennaro Lombardi en 1905 conocido
en la actualidad como "Patriarca della Pizza" y cuyo restaurante es
Lombardi's en Little Italy, Manhattan. Luego se convirtió en negocio y en un
mercado para explotar como bien vieron Shakey’s Pizza, la primera franquicia
que se abrió en USA en 1954, y en el 1958 gracias a un estudiante de 18 años
nació Pizza Hut.
El 1984 se fundó la Asociación de la Auténtica Pizza Napolitana, y
sólo reconoce 2 tipos de pizzas, la “marinara” (no tiene nada que ver con
marinera) y la Margarita, y establecen un montón de reglas para su elaboración,
desde el tipo de horno, la temperatura, hasta el tamaño de la pizza.
En el mes de diciembre de 2009, la pizza napolitana fue reconocida con la denominación de origen por la Unión Europea.
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